Vienen al vacío -con lo que se conservan un buen tiempo y sin heladera. Las hago puré, mi método preferido es con el prensaajos pero se puede usar tenedor, mortero, qué se yo... lo importante es molerlas.
Con este puré de castañas reemplazo la mitad de la harina de los ñoquis. Pongo dos partes de puré de papas, una de harina y una de castañas. Sin huevo. Sal, pimienta.
Y mezclo hasta formar la masa. Al principio es como que se gruma todo, pero después se compone.
No la amaso, sólo mezclo hasta que formó bien el bollito. Después formo los ñoquis, yo con mi infame método: los ñocubitos.
Se cuecen como cualquier ñoqui, en agua hirviendo con sal hasta que floten. Para la salsa, puse cubitos de bondiola a cocinar a fuegio bajo, para que se derrita la grasita y se frían en ella. Añadí Pfifferlingen y crema (sal, pimienta, tomillo, romero) y dejé reducir. Me gusta acompañar estos ñoquis con salsas de hongos, para complementar el sabor a bosque de las castañas.
Lástima que no me gusten las castañas...
ResponderBorrarPero doy fe de que tu guisito de cerdo con Pfifferlingen es espectacular. Se me hace agua la boca de recordarlo.