Hoy traigo dos inclasificables o, si se quiere, dos descolgados para los que no encontré compañeros de rubro o hilos conductores con que agruparlos en cualquier otro domingo.
Este bonito cocodrilo hecho con mostacillas e hilo proviene de las profundidades, no de las cloacas de Nueva York sino del placard de mi abuela. No sé quién lo hizo, o de dónde salió, pero los cocodrilos son animales grandotes y peligrosos -Tarzán los peleaba!- así que me parecía muy cool que mi iaia tuviera uno. Se podrá argüir que esa cabeza parece más de culebra que de cocodrilo. No señor, que digo yo que es un cocodrilo y se acabó. Lo más loco es que si no fuera por los más de 50 años que tiene, podría ser uno de esos colgantitos que una lleva en el móvil.
Esta es una vela y data de cuando mi mamá era chica. En Argentina y en los 80's, las velas de cumpleaños no distiinguían demasiado por su creatividad. Mi mamá siempre me decía lo bellas que eran las velas que había en Barcelona cuando ella era chica. Y yo mucho no le creía, hasta que en algún momento y de lo más profundo de algún armario apareció esto. Fue a parar directo con los tesoros. Y mi mamá diciendo que esta vela, en realidad, no era gran cosa.
~ Recuerde: Haciendo clic sobre las fotos, se agrandan! ~
Como siempre, excelente. Me encantó el cocodrillo. Y yo lo usaría para el celu o de llavero. Besos
ResponderBorrarQue loquísimo el cocodrilo! me encantó.
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