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26.7.08

Todo sobre mi madre

A mi mamá le gustaba el chocolate, el café, los dulces, el ajo. El olor del ananá la descomponía. Cocinaba como los dioses y desde que tengo memoria aprendí de ella, aunque teníamos diferencias de opinión -y por ende de método- en las proporciones de la crema catalana. Para Navidad decoraba (decorábamos) primorosamente las galletitas de miel q se repartían a tutti quanti. Siempre te ponía una cucharada más de comida después que habías dicho "basta". Nos dejó jugar con -y estropear- objetos antiguos que eran recuerdos de su familia, pero jamás nos dejó tocar sus lápices de colores. Si nos portábamos mal nos daba un chirlo. Si nos portábamos muy mal, nos ponía en penitencia en el cuarto. Lo peor que le podías hacer era no avisarle si ibas o no ibas a estar para comer. Tenía más gatos de lo recomendable, y los sobrealimentaba cual si fueran lechones para fin de año. Tenía memoria de elefante y era terca como una mula. Amaba a los animales, salvo las cucarachas. Los monos tampoco la entusiasmaban mucho porque, decía, se parecen demasiado a la gente. No le gustaba cortar el pasto porque le gustaban los yuyos. No usaba sus dientes postizos porque le resultaban incómodos. Hacía planitos de casitas y listas de las cosas más variadas. Leía mucho. Le gustaban la fantasía, la ciencia ficción y las novelas de misterio. Me pasó el gusto por Bradbury y Agatha Christie. Se convirtió en fan de Harry Potter. Aunque puteaba contra la tele, la miraba mucho también. No quería cable para no pasarse el día frente a la tv. No le gustaban las telenovelas, pero en los últimos años se había enganchado en alguna que otra de las menos clichés. Le encantaba el cine y estaba perdidamente enamorada de Sydney Poitier, a quien en la familia conocíamos simplemente como "el Negro". Sus géneros preferidos coincidían con los literarios, y además era fan de los dibujitos animados de Disney y las pelis clásicas de aventuras. Las de antes y las de ahora. Las de Errol Flynn en Sábados de Súper Acción y la trilogía del Señor de los Anillos en El Mundo del Espectáculo (me late que le gustaba Viggo...) Cantaba como el reverendo. No era muy melómana pero le gustaban Harry Belafonte, Tchaikovski y Los Pericos. Usaba sólo dos tipos de calzado: mocasines y ojotas. Le caían bien los judíos. En cambio le tenía rechazo a los árabes y el Islam, desde siempre. Era anglófila, pero detestaba el té. Le gustaba hacer regalos. Insistía en mandarme powerpoints por email, que yo borraba sin abrir porque los odio. Le gustaba escribir en hoja cuadriculada o lisa, rayada no. Yo le había comprado un cuaderno lindo, para mandárselo en combo Dia de la Madre/cumpleaños, con un bicho en la tapa que dice "Ohne Mama ist alles doof" (algo así como "sin mamá todo es soso"). Ahora no tengo a quién regalárselo.
"To the well-organised mind, death is but the next great adventure"
E.P.A.: Mil gracias a todos los que dejaron comentarios... un post como este nunca está completo. 

9 comentarios:

  1. Snif...

    Todas esas cosas que sólo sabemos, que sólo nos importan, si pertenecen al mundo de las personas más queridas. ¿Cuánto tiempo se tarda en definir todos esos "settings"? ¿Cuándo nos damos cuenta que eran las hojas rayadas las que nos sentaban mal?

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  2. Hermosa forma de recordarla.Yo siempre recuerdo que era un gusto salir a la calle y encontrarte con alguien que hablaba catalan tan bien. Y que para el nacimiento de mi beba se acordo de mi y me regalo lo mejor que me pueden regalar en el mundo.. una butifarra y una sobresada.
    Un ole! enorme para tan bella mujer!

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  3. Ups! Soy Anita pero me reconocio como la pagina de la Feria de Venado :P
    Misterios computadoriles si los hay

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  4. qué linda forma de recordarla!!! yo me acuerdo siempre de su odio por las bajas temperaturas y su fascinación por el sol...

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  5. querida nuerita chiquita.-Emocionante el recuerdo de LulaUna de las cosas buenas de la vida son los buenos recuerdos,que quedan forever

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  6. Hasta ayer pensaba que todavía no habías juntado ganas de escribir, ya que cliqueaba en Nuri's blog que tengo en la barra y se me abría en Börek, vieja entrada (que por cierto ahora sí ya hice, muy rico). Y anoche Juan entró desde los vínculos de Igna, y me comentó qué lindo lo que habías escrito sobre tu mami, que no ibas a hablar de comidas egipcias porque Igna te había acaparado el tema. Así que acabo de entrar por la misma vía, no sé porqué mi otro modo de ingresar se quedó frenado en el pasado.
    Me conmovió lo que contás de tu mamá, está muy lindo, y me hiciste lagrimear con tu regalito trunco. Qué suerte que pudo morir y no quedó como una ameba, hubiera sido atroz, nadie se merece eso. Lindos recuerdos.

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  7. Snif!
    Te quedó muy bien, puedo dar fe directa de varios de los puntos... Como yerno me sobrealimentaba más que a los gatos!

    Que dificil de procesar y escribir, con mi iaia apenas pude...
    Y en momentos de estos estar afuera es lo peor.

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  8. Ya van un par de veces que de hurtadillas vuelvo a leer este post. Todas las veces se me hace un nudo en la garganta y se me humedecen los ojos...

    Es emocionante tipo "Carrozas de Fuego" emocionante, pero de película indie...

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  9. A tu mama tambien le gustaban los dias de lluvia, esas tormentas inmensas con rayos y truenos, la verdad, el olor a tierra mojada, el sol, la playa, el mar, las conchas, las piedras, las calcomanias, el champagne el color verde, el agua fria, la ropa comoda a la de moda.
    Nu queria comentarte algun post por primera ves, pero lo dejo aca hermanita porque me voy a deshidratar. Se fue Lula que siempre penso en nosotros primero antes que en ella, se fue pero mucho nos dejo. Fuerza. Te amo Juanjo

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