No es que tenga nada en particular contra el bueno de Valentín, que se dedicó a casar a parejas enamoradas contra los designios de Roma pagando con ello con su vida. Es del todo apropiado que en algunos sitios su onomástico sea, pues, el día de los enamorados. A menos claro, que en dicho sitio ya exista un día de los enamorados. En Catalunya, ese día es el de Sant Jordi, quien dice la leyenda, mató a un feroz dragón (sería un Hungarian Horntail?) que se morfaba a las doncellas del reino. Por supuesto, nuestro Georgie llegó a la escena de la batalla cuando el lagartijo estaba por manducarse nada menos que a la princesa. De la herida mortal que abatió al sáurido, brotó una rosa roja como la sangre del monstruo, que Sant Jordi obsequió a la princesa como prueba de amor. Por eso, en Sant Jordi se regalan rosas a la mujer amada. Años más tarde, y en el mundo real, el día de Sant Jordi no va que se mueren El Bardo de Avon y el Manco de Lepanto, o sea, Shakespeare y Cervantes. De ahí que para Sant Jordi se celebre también el día del libro. La gente se regala libros, y en Catalunya, la fiesta es un verdadero fenómeno de masas. Para comprobarlo, no hay más que aprpincuarse a las Ramblas,
en el corazón de Barna. Las librerías ofrecen mercadería con descuento, y en todos lados se montan paradas de venta callejera, donde además hay firmas de libros por los autores. Imaginar la feria del Libro pero en la calle, en puestos tipo feria hippie en lugar de stands, y gratis. Además se suman los puestos de flores de la rambla más los provisorios del caso vendiendo rosas. Se calcula que el 10% de la
venta de rosas del año en Catalunya se realiza este día. Imagináos.Bueno, la cuestion q fuimos Nacho y yo a la Rambla, y como no, cumplimos con la tradición en todo su esplendor. Nos encontramos en Pza Catalunya pues el venía de una actuación castellera, el se apareció con la rosa de rigor y yo le regalé una novela en catalan, "Tor: tretze cases i un mort". No sé de qué trata pero el título promete. Él me sorprendió con la Guia de Natura del Park de Collserola, una masa pq ya fuimos dos veces y nos queda muy cerca. Luego el se compró un librito de no sé qué y yo conseguí la versión original en inglés del Señor de los Anillos. Luego nos tomamos un café por ahí y volvimos a casa tempranito.
en el corazón de Barna. Las librerías ofrecen mercadería con descuento, y en todos lados se montan paradas de venta callejera, donde además hay firmas de libros por los autores. Imaginar la feria del Libro pero en la calle, en puestos tipo feria hippie en lugar de stands, y gratis. Además se suman los puestos de flores de la rambla más los provisorios del caso vendiendo rosas. Se calcula que el 10% de la 
venta de rosas del año en Catalunya se realiza este día. Imagináos.Bueno, la cuestion q fuimos Nacho y yo a la Rambla, y como no, cumplimos con la tradición en todo su esplendor. Nos encontramos en Pza Catalunya pues el venía de una actuación castellera, el se apareció con la rosa de rigor y yo le regalé una novela en catalan, "Tor: tretze cases i un mort". No sé de qué trata pero el título promete. Él me sorprendió con la Guia de Natura del Park de Collserola, una masa pq ya fuimos dos veces y nos queda muy cerca. Luego el se compró un librito de no sé qué y yo conseguí la versión original en inglés del Señor de los Anillos. Luego nos tomamos un café por ahí y volvimos a casa tempranito.
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