Los cumpleaños de amigos/as son una win-win situation para sacarme el gusto de hacer tortas ricas y decoradas que en casa no hago porque sino nos pasamos 3 días comiendo una torta engordante, que al final ya está seca como lengua 'e loro (y obvio que de entrecasa, de decorarla ni hablar). Mi último desinteresadamente egoista ofrecimiento de hacer la torta fue para el cumpleaños de Vito (marido de Elenaitalia), hace una semana. Como el homenajeado es fanático del ajedrez, la inspiración me dictó una torta ad-hoc:
La torta era de chocolate, rellena de Nutella, con cubretortas de vainilla, chocolate y chocolate con leche.
Las piezas blancas las hice con mazapán, las "negras" con nougat de avellana.
Lo que aprendí haciendo esta torta:
- Los caballos son más fáciles de hacer que los alfiles.
- La próxima vez uso chocolate de verdad en lugar de cubretortas, cuya velocidad de secado es impredecible, y los restos no se los come ni cadorna.
- Mojar una capa de torta con almíbar y querer untarle Nutella es una mala idea. O la torta tiene que estar más seca o el relleno ser más blando.
Para terminar: Si quieren la solución al problema (que busqué en internet, yo de ajedrez no sé un corno), seleccionen el texto entre asteriscos con el mouse.
SOLUCIÓN: ***
Kf4++ ó Ke3++ ***
La verdad que te quedó espectacular, me imagino el recontralaburo de tallar todas las piezas, además para que quedaran de tamaño y forma semejante entre sí. El no untar sobre algo almibarado me quedaba claro.
ResponderBorrarVito y Elena no se habían ido del pueblo? O fueron de visita?
No, no, la que se fue es Elenaespaña
ResponderBorrarAh, las piezas no se tallan, se modelan.
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