Paseando

El sábado, como bien cuenta Mi Amado Esposo en su blog, fuimos a Strasbourg. Comimos en un restaurant muy bonito, todo lleno de antigüedades. Después paseamos por el centro, por un barrio muy bonito, antiguo, llamado La Petit France, y por los alrededores de la Universidad. La ciudad muy bonita, una melange entre francesa y alemana. Luego de tamaño paseo nos castigamos con una merienda como Dios manda en un salón de té super biyuyesco. Cada uno pidió su café au lait o similar y una porción de torta (Cheesecake para Nacho y Elena, de chocolate para Emrah, de frambuesas para Barbara y de mousse de chocolate y crocante de cajú para moi), todas deliciosas. Y lo mejor es que los precios no eran disparatados, lo cual tratándose de Francia es doblemente bueno. A la vuelta nosotros dos nos bajamos en Karlsruhe donde está viviendo Pierre, fuimos con él a una fiesta en casa de unos pibes (es ciudad de estudiantes, la joda abunda). Buen ejercicio de alemán pues era la lengua dominante en la casa. Nos quedamos a dormir en lo de Pierre y al día siguiente hicimos un poco de citytour a pesar de la lluvia y el día de mié... que hacía. Fuimos al museo de la ciudad, en el Palacio, muuuy bueno! con mucha variedad de cosas y un puesta muy actual, o sea, con muchas boludeces para q una además de ver pueda tocar y hasta probarse. A jugar a la Barbie se ha dicho!